Cuando por su cumpleaños le regalaron a Marta una máquina para hacer nubes de algodón en casa, no me pude poner más contenta.! Empecé a pensar enseguida en recetas para hacer con algodón de azúcar. Recetas dulces, primero. Por ejemplo una sopa fría de fresa con un poco de queso, una combinación de lo más clásica, que se convierte en un lujo de plato con ese detalle dulce que del azúcar etéreo.
Se nos acaban las fresas, pero tengo muy claro cómo tener fresas en casa todo el año, dulces y en su punto. Y degustarlas en diciembre, o en febrero, como si acabaran de llegar del mercado. Fresas de temporada.
Cuando están en su mejor momento compro algunas cajas; trituro las fresas con azúcar en la Thermomix hasta obtener un puré fino, y las congelo en bolsas. De ahí puede surgir en cualquier momento un helado de fresa, una mermelada de fresa, un frosting de fresa, o una sopa de fresa!! sin tener que ir a la compra ni complicarnos la vida podemos improvisar un postre riquísimo para cualquier compromiso.
Como el puré resulta muy dulce combina a la perfección con el queso mascarpone que es muy neutro. Lo podemos dejar ahí y no ir más lejos… pero si tenéis que hacer algún regalo a vuestros hijos, os recomiendo que seáis egoístas y penséis en la máquina de hacer algodón de azúcar.
No sólo porque se lo van a pasar bomba, sino porque si sois un poco cocinillas, le vais a encontrar una rentabilidad añadida. Como en éste caso, dar un toque de postre especial a una elaboración super sencilla. O para obtener caramelo en polvo ( que se van quedando en los bordes ) y hacer recetas como el lingote de foie con sal y caramelo sin tener que hacerlo expresamente y tan solo añadir la sal luego.
Ingredientes:
– 1 kilo de fresas.
– 125 g de azúcar.
– 1 tarrina de queso mascarpone.
– Hojas de menta o hierbabuena como adorno.
– 50 g de azúcar para hacer algodón.
Preparación: Trituramos las fresas con el azúcar hasta obtener una sopa fina. Lo podemos conservar unos días en la nevera o cerca de un año en el congelado. Meter el mascarpone media hora antes de servir en el congelador para que quede más duro y se pueda moldear sin que pierda la forma con dos cucharas o un dispensador de helado. Colocar sobre la sopa.
Si disponemos de una máquina de hacer nubes de azúcar, seguir las instrucciones del fabricante; es muy sencillo, normalmente se espera a que se caliente y luego se coloca una pequeña cantidad de azúcar en el centro. La máquina rota de forma permanente y enseguida se forman hilos de azúcar que se recogen con un palito largo. Hay muchas marcas en el mercado. Creo que la que le regalaron a Marta era la de tienda CASA, pero el modelo es el de la marca Cotton Candy que podéis ver AQUI.
De la misma forma que el dulce de la sopa de fresas se atenúa con el mascarpone, éste se enriquece con el algodón de azúcar que le da un punto más goloso cuando lo comemos junto. Así el plato es más ameno… sopa sola…. algodón solo…. algodón con queso…. queso con sopa….
Delicioso y divertido.
Beatriz Tobegourmet.