Empezamos con las propuestas de platos especiales para las Navidades. Siempre os digo que no es necesario derrochar nada más que imaginación para componer un menú atractivo, original y con producto de temporada que siempre es sinónimo de calidad.
Hoy os traigo unos canelones deliciosos de calabaza, beicon, nueces caramelizadas y pasas. Un plato estupendo para Año nuevo, para el día de Reyes; esas otras fechas en las que hay que seguir haciendo comidas con un toque festivo sin que sea el típico pavo, o los clásicos langostinos.
La calabaza está en su mejor momento y es siempre una opción fantástica en invierno. Su toque dulce va perfecto con el beicon, y así mismo unas pocas nueces o pasas le aportan textura al relleno.
Esta es una receta facilísima, y de gustar a todo el mundo, incluso para los pequeños, a los que a veces no sabemos qué ofrecer.
Ingredientes:
– 500 g de calabaza.
– 75 g de beicon en lonchas.
– 60 g de nueces peladas.
– 50 gr de pasas deshuesadas.
– 2 ó 3 cucharadas de azúcar.
– Un vaso pequeño de caldo de ave.
– Una caja de canelones, o láminas de pasta.
– Una caja de canelones, o láminas de pasta.
Para la salsa bechamel:
– 1 litro de leche entera.
– 50 g de mantequilla.
– 160 g de harina.
– Sal.
Preparación:
En un mortero troceamos las nueces machacándolas sin que se lleguen a deshacer para que queden muy pequeñitas. Las llevamos a la sartén con el azúcar y a fuego medio removemos hasta que se tuesten con él sin que se lleguen a quemar. Las reservamos.
En la misma sartén con un hilo de aceite sofreímos el beicon previamente cortado en trocitos. Añadimos la calabaza en pequeños tacos y la removemos unos minutos integrándola con el bacon. Incorporamos parte del caldo, sin que llegue a cubrir la calabaza, y dejamos que se haga poco a poco, a fuego lento, unos diez minutos revolviendo de tanto en tanto. Volvemos a añadir más caldo, para que siempre esté jugosa mientras se va cociendo.
Cuando vemos que está hecha añadimos las nueces y las pasas y lo dejamos unos minutos más. Luego lo reservamos en un bol. Pasamos un papel de cocina a la sartén y ponemos un poco de mantequilla.
Cuando vemos que está hecha añadimos las nueces y las pasas y lo dejamos unos minutos más. Luego lo reservamos en un bol. Pasamos un papel de cocina a la sartén y ponemos un poco de mantequilla.
Durante el proceso anterior, en una cacerola con agua y sal vamos añadiendo las láminas de pasta, o canelones, de uno en uno para que no se peguen, para cocerlos al dente según las indicaciones de la caja. Los escurrimos con un colador grande y los reservamos rociados con aceite para que no se peguen unos a otros.
Llevamos de nuevo la sartén al fuego y le añadimos la mitad de la leche. La otra parte la vertemos en el vaso de la batidora, añadimos la harina y batimos hasta que no haya ningún grumo. Cuando la leche de la sartén rompa a hervir, incorporamos como un hilo la leche del vaso mientras removemos rápidamente hasta que se forme una salsa bechamel uniforme y lisa.
Añadimos la sal y dejamos unos diez minutos a fuego lento para que la harina se vaya cociendo mientras removemos de vez en cuando.
Si queremos gratinar los canelones basta con colocarlos dentro de la sartén y salsearlos por encima con la misma bechamel. Si usáis la Infinity de Bra, con soltarle el mango basta para meter el recipiente en el horno y que gratine. Esta sartén es una pasada, porque a parte de que no se pega nada, como véis podemos hacer todo el proceso con el mismo utensilio sin manchar nada más.
os dejo el VIDEO de nuestra experiencia cocinando con la sartén infinity de Bra en la Cookiteca de Barcelona hace unas semanas. Donde fue presentada con todos los honores a un grupo de blogueros procedentes de todos los puntos del mapa entre los que tuve la suerte de estar. No os lo perdáis porque es muy divertido, salimos todos muy guapos y solo dura un minutillo de nada.
Si no vamos a gratinar, emplatamos los canelones y luego vertemos la salsa bechamel sobre ellos. El plato es espectacular. El relleno de calabaza, pasas, beicon y nueces caramelizadas es francamente exquisito.
Un plato para triunfar, una receta perfecta para Navidad!