Cuando viene mi familia a visitarnos o alguna amiga a pasar un par de días, me gusta preparar para el desayuno bollería casera, ofrecer una variedad de mermeladas, y por supuesto un buen café.
En estas fechas son muchos los hogares que reciben hijos, padres, padres con sus hijos… Así que si os ha tocado el papel de anfitriones y os apetece agasajar al personal con un desayuno estupendo, este bizcocho de castañas con dulce de leche es una opción ideal.
La receta del bizcocho de castañas es muy fácil porque tan sólo se trata de sustituir la harina normal por harina de castañas. La podéis encontrar fácilmente en el hipermercado, aunque también la he visto en pequeñas tiendas gourmet.
La harina de castañas es el resultado de moler la castaña pelada, así de simple. Se usa para bizcochos, panes o galletas como ESTAS que hice de castaña y queso, riquísimas.
Se me ocurrió la combinación de este bizcocho con el dulce de leche, o toffe, y lo cierto es que la mezcla es espectacular. El dulce de leche podéis encontrar también en los supermercados, pero yo normalmente lo hago en casa porque la receta es muy fácil. Aquí la tenéis.
Una vez hecho dura bastante y se puede utilizar para otros postres; para añadir a un helado de vanilla por ejemplo. Yo lo conservo en un bote de cristal en la nevera. Los tarros de conservas los suelo aprovechar porque me parecen la mejor opción para guardar ciertos alimentos, sobre todo especias.
Vamos con la receta del bizcocho de castañas, vereis qué sencilla:
Ingredientes:
– 3 huevos.
– 300 g de azúcar.
– 400 de harina de Castañas.
– 125 g de mantequilla punto pomada.
– 1 cucharadita de bicarbonato.
– 1 cucharadita de levadura Royal.
– 1 vaso de leche.
– 1 chorrito de limón.
– Una pizca de sal.
Preparación:
Batimos los huevos con el azúcar. Añadimos la mantequilla y volvemos a batir. Al vaso de leche le echamos en zumo de limón, esperamos diez minutos (es la buttermilk) y lo incorporamos a la mezcla.
A continuación vamos añadiendo la harina poco a poco, mientras batimos con unas varillas, o con un robot de cocina, y así mismo la levadura, el bicarbonato y la sal.
Engrasamos un molde con mantequilla y vertemos la masa de nuestro bizcocho de castañas en él y lo horneamos a 180ª durante 45 aproximadamente. Comprobaremos que esté hecho pinchándolo con una aguja y observando que sale seca.
Podemos emplatarlo de forma individual bañado en dulce de leche, o bien presentarlo entero y que cada cual se administre su porción a su gusto; colocando el toffe en una salsera o si os componéis un bote tan chulo como el que os he mostrado con washitape o con otras ideas para que quede bonito, lo podéis llevar perfectamente a la mesa. Yo opto por esto último; a todos les encanta el tarro y además de ofreceles un rico bizcocho de castañas les presento una original idea para luego hacer en casa.