No vayáis a pensar que este tipo de platos forman parte del menú diario de casa, en la cocina soy imaginativa pero mucho más sencilla en el día a día de lo que pueda parecer. Sin embargo me gusta tener una colección de platos sorpresa, o platos especiales, para cuando nos vienen a visitar. Cosas sencillas pero vistosas como la receta de hoy, un plato frío que va a triunfar en casa este verano y que tiene su historia en la galería de fotos de Instagram de mi amiga MJ.
Muchos de los lectores de este blog seguís mis noticias también por Facebook; bien en mi perfil de Beatriz Tobegourmet, o en la Fanpage Tobegourmet. Los contenidos son parecidos, pero no iguales. Sin embargo no todos llegáis a Pinterest o Instagram. Redes sociales mucho más visuales donde prima la fotografía, sobre todo en el primero, y se da cabida a publicaciones más personales, (donde comí ayer, con quien, el día que hace visto desde mi ventana…) como en el segundo.
En mi Instagram podéis seguirme la pista estas próximas semanas cuando haga mis vacaciones en agosto y deje temporalmente de publicar post. Instagram es actualmente la red social que más me gusta, sin la publicidad tremenda que nos inunda Facebook y con mucha información sobre aquello que nos gusta, en mi caso: la comida, la fotografía y la ciudad de San Sebastián.
Por el primer motivo, la comida, sigo a MJ (no deberías perderos su canal de youtube que cuenta con alrededor de 125.000 suscriptores. Es una crack).
Y no sé cuando fue que, siguiendo la secuencia de platos que estaba cenando o comiendo en el Restaurante Vivanda, reparé en un plato precioso y con una pinta estupenda: “Ajoblanco con fresitas y boquerones”. Hice captura de pantalla y lo guardé pensando en reproducirlo, aun sin haberlo probado.
De ese plato salió éste. En lugar de fresas, que ya no encuentro, frambuesas y con un toque de manzana que sé que al ajoblanco le va muy bien. Tiempo de preparación…. pues si se tienen los boquerones previamente hechos, lo que se tarde en emplatar. O sea… diez minutos.
Ingredientes:
– 1 brik de ajoblanco Alvalle (es verano, no nos vamos a complicar).
– 200 g de boquerones en vinagre ( estos sí los los hacemos en casa).
– 1 cebolleta morada.
– 1 caja pequeña de frambuesas.
– 1/2 manzana golden.
– Flores comestibles para decorar (opcional).
Preparación: En primer lugar tenemos que tener preparar días antes los boquerones en vinagre. Si queremos improvisar los podemos comprar hechos, pero yo prefiero mil veces los míos y en verano los preparo muchísimo, así que no es difícil que tenga en la nevera.
AQUI podéis mi receta para hacer boquerones en vinagre caseros y deliciosos.
Emplatamos colocando un poco de ajoblanco bien frío en el fondo, a continuación 3 ó 4 boquerones, unos gajos de cebolleta morada (mejor previamente escaldada para que esté algo más suave), y rematamos con unas frambuesas y unos trocitos de manzana Golden con su piel.
El plato es espectacular de bonito y creedme, delicioso!!. Una sopa fría que como aperitivo es un éxito seguro, elegante y delicada con sabores sorprendentes que sin embargo encajan a la perfección.
Es buena idea darle un toque lila con unas flores, cuidado con ésto: deben de estar libres de pesticidas, bien limpias y no ser tóxicas, estos pétalos son de la flor de “lirio africano” que es preciosa pero no se considera flor comestible; otra opción sería el pensamiento lila que sí lo es.
Os preguntaréis qué narices pinta entonces en el plato? bien, las aceitunas con hueso también me las he encontrado yo recientemente en una ensalada y ante la duda ( en realidad no había duda) el sentido común me ha indicado cómo actuar.
El caso es que…. queda precioso no es verdad?